Llegó septiembre: temido por muchos y anhelado por otros cuantos, se trata de uno de esos hitos del calendario que dan pie al comienzo de nuevos proyectos. Con 1,5 billones de estudiantes en todo el mundo, el inglés es una de esas metas sin fecha de caducidad, que llaman a nuestra puerta al inicio de cada nueva etapa.
Aprovechamos el lanzamiento de los nuevos cursos para adultos del British Council para hablar con Simon Thorley, su responsable, sobre las tendencias y claves para un aprendizaje de inglés realista y eficaz.
1. ¿Qué os ha llevado a renovar vuestros cursos?
-La vocación de seguir mejorando nuestro sistema de enseñanza y de ofrecer una oferta conectada con las necesidades y aspiraciones de los adultos que estudian inglés. Para ello, hemos llevado a cabo una investigación que nos ha permitido conocer las motivaciones de estos estudiantes, y tratar de reunir en nuestros cursos los nuevos requisitos que hemos identificado, y otros que ya conocíamos tras ocho décadas enseñando inglés en un centenar de países.
2. ¿Qué habéis sacado en claro de esa investigación?
-Multitud de patrones de consumo y algunas tendencias globales sobre este nicho de mercado que se han vuelto a confirmar en estudios como The future demand for English in Europe, desarrollado por nuestro equipo global.
Una de ellas es que el aprendizaje de inglés en adultos está muy condicionado por el actual ritmo de vida. Hemos comprobado que lo que buscan los estudiantes son formatos más cortos, flexibles y personalizables, en los que el uso del idioma en las clases tenga una aplicación muy directa en su trabajo, estudios o relaciones personales.
También hemos visto que es fundamental que los estudiantes completen fuera de las clases el aprendizaje iniciado en ellas. Por eso cada curso seguimos ampliando el programa English Extra, con actividades complementarias y gratuitas para todos nuestros alumnos.
3. ¿Cómo habéis trasladado esos elementos a vuestra nueva oferta?
-La flexibilidad y la personalización de los cursos viene dada por su estructura modular: los estudiantes pueden combinar distintos módulos o bloques de aprendizaje de 30 horas y crear un curso ‘a su medida’, que les permita avanzar a su ritmo, en función de su disponibilidad y necesidades.
A la hora de buscar esa conexión entre las clases y la vida real, nuestros expertos han desarrollado materiales propios que están adaptados a propósitos muy concretos, como puede ser mejorar la confianza en inglés para el trabajo (módulos de Business English) o la precisión escribiendo o hablando (módulos de comunicación).
Otro factor fundamental es que estos materiales se emplean como punto de partida para aprender inglés dentro y fuera de clase. De este modo, ampliamos el margen de maniobra para que los alumnos puedan trabajar en casa y mejoren a su ritmo, en función de su disponibilidad, capacidad y metas.
Además, los que están dispuestos a dar un paso más empleando el idioma en situaciones reales, pueden apuntarse a nuestros talleres complementarios English Extra o participar en los eventos educativos y culturales que organizamos.